El salmón marinado , como ya os dije, me ha dado mucho de sí, por eso hoy os traigo otra de las recetas que hice con él las pasadas Navidades. Puede veniros bien para el próximo S. Valentín, preparais una cenita romantica en casa y con éstos bocaditos, entre otras cosas, seguro que sorprendeis gratamente a vuestra pareja.
En casa gustaron mucho, la receta la copié de mi querida blogamiga María José, si todavia no conoceis su estupéndo blog Cocinando para ellos, os recomiendo que le hagais una visita, me lo agradecereis.
INGREDIENTES:
100 gras. de queso Philadelfia.
150 grs. de salmón marinado.
60 grs. de cebollino, ó cebolleta.
300 grs. de nueces molidas.
4 nueces para adornar, pimienta y pizca de sal.
8 mini tartaletas cujientes, ésta ha sido mi variación a la receta, ( María José, los presentó en una cuchara)
PREPARACIÓN:
En un bol ponemos el queso, el cebollino picado muy menudo, el salmón marinado, tambien muy picadito, un poquitín de sal y una pizca de pimienta molida. Mezclamos muy bien y hacemos bolitas rebozandolas en las nueces molidas. Las ponemos en una bandeja y metemos en el frigo.
Se pueden hacer un dia antes y guardarlas en un taper en la nevera. Se pueden presentar en moldes de magdalenas pequeños.
Yó, opté por presentarlos en éstas mini tartaletas crujientes, y fueron todo un éxito! pués él crujiente de las nueces unido al de las tartaletas, hacia de los bocaditos, una explosión deliciosa de sabores.
Adornamos con mitades de nueces, y listos para llevar a la mesa!
Espero que os gusten.
Y ahora nos vamos de paseo por Gante
Llegamos a primera hora de la tarde procedentes de Brujas en tren. Techo de la estación.
Me impresionó nada más salir de la estación de tren, ver una amplia plaza llena de bicicletas aparcadas.
Cogimos un tranvia, y en 12 min. estás en el corazón de la ciudad. Nos bajamos en la parada del Castillo, el cual no visitamos por hayarse en obras.


Las Viajeras
Escaparates con los típicos encajes de bolillos.
Bellos edificios.
Canal principal.
Mercado, antiguas caballerizas.
Vista nocturna.
Puerta principal. Hay una cerveceria muy típica, pero estaba llena, y además con el frio nos apetecia más algo calentito, y nos tomamos un delicioso capuchino enfrente.
Aquí, en la terraza y no se estaba mal debajo de las sombrillas blancas, rodeados de españoles, como en Bruselas y Brujas.
Si Brujas me encantó porque parecia una ciudad de cuento, Gante tiene un encanto especial... su arquitectura, sus iglesias , su Catedral con sus tesoros pictoricos , su historia...
Me aconsejaron su visita nocturna, y no me defraudó, pues como vereis en las siguientes fotos, mereció la pena pasear por sus lindas calles iluminadas.
Caminito a casa, bueno al Hotel jijii
Desde donde me despido dandoos las GRACIAS por vuestras visitas y comentarios.
BESITOSSS.